martes, 17 de junio de 2008

Delicate

Aquello que fue, ya es; y lo que ha de ser, fue ya; y Dios restaura lo que pasó.
Eclesiastés 3:13

Hoy no quise hacer nada... si... nada. Es difícil no hacerlo, pero por lo menos tengo la intención. O por lo menos, quiero hacer las cosas más vanas que puedan existir, jajajaja.
¿Cómo están todos ustedes? Hace tiempo que no les escribía, si, han pasado muchas cosas, buenas malas, mejores y peores, pero creo que me siento bastante bien, he aprendido a valorar los pequeños detalles, y perdonen por decirlo así tan brusco, pero es lo que mi mente piensa en cada minuto.
He perdido mucho tiempo, intentando hacerme creer que mi vida está de una forma, siendo que realmente estaba yendo por un camino que no quería, y que inutilmente trataba de ser feliz, o de tener paz. La verdad es que estaba incómodo, me sentía en un estado de futileza máximo.
Pero ahora las cosas van bien... eso creo.
Me siento relajado... tranquilo, más livianito... como una pluma dibujada en el viento, o como una hoja que se la lleva el mar hacia adentro.
Ahora puedo llorar, mis lagrimas pueden seguir su caída dibujando una pequeña sonrisa, por que me siento feliz, me siento en paz.
Quiero compartirlo, con ustedes, con Dios, como mis amigos, con mi familia, con la vida, pero sobre todo con Dios.
Anoche pude sumergirme en mi cama con una sonrisa en mi boca, de nada, de felicidad... de algo inexplicable, de una dulzura y una melancolía de esas que algunos conocemos. Es un éxtasis, es nuestro éxtasis, estar en una comunión infinita, inmensa, que no se convierte en un globo de fantasías, si no que cambia mi vida por un globo inflado con alegría, y que es a prueba de alfilieres, aunque aveces se desinchará.. si.. es como otra etapa.
El título?... si, es lo que estoy escuchando.


mr. Brook.


miércoles, 4 de junio de 2008

Hasta siempre

¿Cómo empezar esta vez?
Creo que un par de lágrimas al principio dirían todo lo que siento en este momento. Pero basta de llorar, ha sido suficiente. Ahora es necesario que esté feliz.
Sé que quizá no están entendiendo nada. Y la verdad, no sabría como decírselo ni explicarlo.
Por esto sólo diré que espero que Dios te bendiga mucho. Te extrañaré. Y esta imagen va para ti. Te quiero.
¿La recuerdas?
Pues, no quiero algo triste, si no algo gracioso, algo que te guste, que te rías con ello.
Recuérdame.




mr. Brook